¿Cómo cuidar a las gerberas?

Jueves, 23 Julio, 2015
 
Una de nuestras plantas estacionales favoritas son las gerberas. ¡Y ahora mismo el Centro de Jardinería de Fuerteventura rebosa de estas plantas!
 
Con sus espectaculares y coloridas flores, no podrás evitar enamorarte de ellas... ¿Quieres saber los secretos de su cuidado? ¡Sigue leyendo!
 
Las gerberas son plantas de exterior de la familia de las compuestas como las lechugas. Sorprendente ¿verdad? Es muy fácil ver la similitud: igual que las lechugas, no tienen un tronco en sí, sino que crecen muchas hojas alrededor de un mismo tallo. 
 
Las hojas crecen abundantemente y se esparcen. La gerbera tiene una gran ventaja, y es que su raíz es pivotante, es decir, crece hacia abajo y no hacia los lados. Por eso, no tiene competencia por los nutrientes y el agua con otras plantas. 
 
No tolera bien el viento y para crecer necesita al menos 6 horas de luz. Evita plantarla en tierras arcillosas como las que hay en nuestra isla. Si bien es cierto que al ser volcánica tiene muchos nutrientes, normalmente existen carencias importantes de calcio que pueden verse como pequeñas manchas blancas en la superficie de las hojas. Lo ideal aquí en Fuerteventura, es plantarla en macetas bastante profundas por la forma de sus raíces. En nuestro Centro de Jardinería tenemos gran cantidad de modelos entre los que poder elegir para que tu planta crezca como debe.
 
 
Esta planta emite una o más vainas florales al empezar la primavera, dependiendo del riego aportado durante el invierno. En este momento es recomendable abonar la tierra para asegurar una correcta floración. Lo más recomendable es el uso de nuestros abonos líquidos estándar 5-5-5 (5ppm de nitrógeno, 5ppm de fósforo y 5ppm de potasio). Además, la rigidez de la vaina es un indicador de la hidratación de la planta. Si las vainas de tu gerbera se doblan hacia los lados, es porque requiere un riego más abundante y frecuente.
 
Deberás podar las vainas al terminar el verano, a no ser que quieras sacar semillas para plantarlas posteriormente. En ese caso, deberás dejar la vara floral después de marchitarse la flor y en el centro del capítulo encontrarás las semillas. Pero si decides podarla, el frío y el agua asegurarán que vuelva a florecer. Aunque la planta se quede perenne durante otoño e invierno, regarla a diario es lo idea.
 
¿Tienes ganas de tener una gerbera en casa?
 
¡Ven a nuestro Centro de Jardinería donde encontrarás gran variedad!
 
Además, podremos asesorarte sobre las macetas y el sustrato que mejor le van, así como del abono y algunos trucos más para su cuidado.